Ainsss... fiebre peliculera

Lo dicho, que sigo con mi fiebre DVD/VCD/DIVXera. Anoche nos metimos entre pecho y espalda "El Diputado", que una va de muy culta y, claro, se ve esas cosas que antaño eran consideradas una mierda pinchá en un palo, cosa del destape y tal. Y hoy en día es algo que se considera como de supermegaestupendo, de director de culto y cosas así. Y, claro, gracias a críticas tardías como estas, se le ocurre al Eloy de la Iglesia y volver a probar suerte hace un par de años con el plomazo de "Los novios búlgaros", con resultado infumable, ciertamente.

El caso que visionar la de El Diputado es debido a la afición de mariquitas reivindicativas (y ecologistas y más cosas de concienzudas o concienciadas socialas y esas cosas tan moelnas) que nos ha entrado desde hace un tiempo, y que nos hace ver cosas bastante horribles o cosas estupendas. Bueno, a lo que iba, que El Diputado po ni es algo sobresaliente ni la típica españolada, se hace pesada en ciertos momentos, pero ligera y liviana en otros. Y, sobre todo, con dos cojones para dedicarse a tratar tantos temas intratables en la época. Que, realmente, de ahí estriba el valor de la peli y, en general, de toda esta época de Eloy de la Iglesia. Po eso, que olé sus cojones, aunque no entiendo como puede el Sacristán namorarse del pánfilo/niñato del "Juanito" en lugar de beber los vientos por el machirulo de Nes, que sí que está taco bueno. ¿Alguien le ha seguido la pista al chiquito este? No sé si habrá hecho algo más tras esta etapa.

En fin, una siempre se arrepentirá de no haber dado rienda suelta a sus más que manifiestas dotes artísticas y haber dirigido/protagonizado/guionizado y esas cosas mi propia peli, que eso me hubiera dado mucho más caché. Vamos, eso además de pintar (en plan impresionista-naivista, o algo asínnn, como el Janeiro senior), esculpir y remodelar el Reichstag o diseñar algún puente por ahí perdido, no sé no sé, que yo doy pa mucho.

Y ahora que en la tele, la Paula Vázquez (enseñando su ombligo y recién estrenada cintura) se dedica a desangrar una yegua de esas africanas: ¡pobres keniatas! Bueno ¿keniatas o kenianos? Que yo, cuando era un churumbel, los comentaristas de atletismo decían que keniatas y ahora resulta que les llaman mal, como a la Tarzana de Chico y Chica, que la llaman mal (en China la llaman la Fumanchurria, la Fumanchueca, y no me extraña, que de mariliendre tiene un rato). Ainsss, que mese va el santo al cielo, que decía yo que mese ha despertao la vena ecologista y tenéis en Greenpeace unos bonitos juegos ecologistas de esos. Ya sabéis, si sois moelnos, po jugad un rato. Y ya que andamos de concienciados, podéis colaborar salvando animalitos entrando en esta página, tiatiatia.

Muacmuac